DOLOR

| 20 mayo, 2013

“Haced, pues, frutos dignos de arrepentimiento, y no comencéis a decir dentro de vosotros mismos: Tenemos a Abraham por padre; porque os digo que Dios puede levantar hijos a Abraham aun de estas piedras.” Lucas 3.8

Jorge Rafael Videla murió en el día 17 de mayo de 2013, llevándose con su silencio la información que hubiese sido pacificadora para el destino de tantas vidas asesinadas y de niños, quienes hoy son mujeres u hombres jóvenes y siguen desaparecidos.

La JUSTICIA conduce a la PAZ.
El juicio justo con el que fue condenado el dictador llevó un parcial alivio de luto a muchos corazones sangrantes.
Sin embargo, el sosiego solo llegará cuando se de a conocer el paradero de los desaparecidos asesinados y en cautiverio.

El ex General pudo haber encontrado paz para su alma al arrepentirse y hacer frutos dignos de arrepentimiento, no obstante, la sangre vertida sigue clamando desde la tierra. (1)

En la hermana nación de Guatemala, la semana pasada, fue condenado por genocidio el General Efraín Ríos Montt. La sentencia fue 80 años de prisión.

Creo que es hora de que las capas civiles de nuestra sociedad, que reivindican a estas personas “sin afecto natural” y ciertos clérigos de las diferentes religiones -evangélicos incluidos-  replanteen sus posiciones y los apoyos brindados al “orden del cementerio” que aplastó la libertad y sumió en una larga noche de pobreza y frustración que aún seguimos pagando los pueblos avasallados.

Reconociendo la turbulencia de aquellos días, no busco inculpar a nadie, pero sí extraer la lección del pasado que nos ayude a nosotros, la pastoral actual. No debemos cometer los mismos actos de omisión que dejaron al pueblo, o a una parte de él, a merced de las garras del enemigo de nuestras almas, quien vino para matar, hurtar y destruir.

Desinvolucrarnos de las cosas del “mundo” es olvidar que fue JESÚS quien nos envió a este “mundo” conflictivo e intrincado en el que mujeres y hombres pugnan, sufren y se abaten para alcanzarlos con el ministerio de la reconciliación y el misterio del Evangelio (2).

No importando las excusas, argumentos o momentos históricos y políticos, recordemos permanentemente que nosotros somos ministros de la vida, y como tales, debemos defenderla a ultranza. Es una orden divina: “Libra a los que son llevados a la muerte; salva a los que están en peligro de muerte.” Proverbios 24.11

Hermanos, dos simples preguntas nos orientarán para saber si nuestros sentimientos y procederes son correctos: ¿JESÚS haría o avalaría esto? ¿Qué haría ÉL en mi lugar?

Es hora de levantarnos, porque el invierno ha pasado. Salir de los agujeros de la peña en los escarpados parajes. Las vides están en cierne, sus frutos pequeños han comenzado a nacer y las zorras pequeñas amenazan su destino. Es hora de hacer oír nuestra voz más dulce que lleve paz a todos e inunde la tierra de Sus juicios, siempre justos, portadores de Justicia y Libertad. (3)

Entretanto, seguimos avanzando. Tras las pisadas de cada uno que lleva las buenas nuevas, se manifiesta LA JUSTICIA DEL CRUCIFICADO.

EN DÍAS DE DOLOR, UNIDOS MÁS QUE NUNCA, CON MUCHO AMOR.

“La misericordia y la verdad se encontraron; la justicia y la paz se besaron.”
Salmo 85.10

 

TEXTOS BÍBLICOS
(1) “Y Jehová dijo a Caín: ¿Dónde está Abel tu hermano? Y él respondió: No sé. ¿Soy yo acaso guarda de mi hermano? Y Él le dijo: ¿Qué has hecho? La voz de la sangre de tu hermano clama a mí desde la tierra.” Génesis 4.9-10

(2) Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación; que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo, no tomándoles en cuenta a los hombres sus pecados, y nos encargó a nosotros la palabra de la reconciliación.” 2da Corintios 5.18-19

…Y por mí, a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a conocer con denuedo el misterio del evangelio…”. Efesios 6.19

(3) “Mi amado habló, y me dijo: levántate, oh amiga mía, hermosa mía, y ven. 
Porque he aquí ha pasado el invierno, se ha mudado, la lluvia se fue; se han mostrado las flores en la tierra, el tiempo de la canción ha venido, y en nuestro país se ha oído la voz de la tórtola. La higuera ha echado sus higos, y las vides en cierne dieron olor; levántate, oh amiga mía, hermosa mía, y ven. 
Paloma mía, que estás en los agujeros de la peña, en lo escondido de escarpados parajes, 
muéstrame tu rostro, hazme oír tu voz; porque dulce es la voz tuya, y hermoso tu aspecto. 
Cazadnos las zorras, las zorras pequeñas, que echan a perder las viñas; porque nuestras viñas están en cierne.” Cantar de los Cantares 2.10-15

 

 

Guillermo Prein
Pastor fundador del
Centro Cristiano Nueva Vida

 

Cordialmente es la expresión de PASTORESxlaGENTE que, fiel a sus principios, no procura fijar conceptos únicos, sino que busca expresar la diversidad en la pluralidad que caracteriza al movimiento evangélico.
Las notas publicadas en esta edición digital reflejan la opinión particular de los autores.
La dirección de Cordialmente procura que la expresión bíblica “examinadlo todo, y retened lo bueno” sea el objetivo, por lo cual se invita a los distintos escritores a presentar sus fundamentos dejando el juzgamiento del artículo en cada uno de los lectores.

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Categoria: DOSSIER de ACTUALIDAD, Edición 4 | Iglesia y Sociedad, entrega 3

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